martes, 11 de octubre de 2011

A SONIA

Sonia eres luchadora y trabajadora. Yo a ti te comparo con el lucero del alba, que derrocha su esplendor a altas horas de la madrugada. Ese mismo lucero es el que refleja tu corazón y tu alma.
Ese corazón tan grande, que tienes compartido en tu vida cotidiana también entre compañeros y amigos.
Este mismo lucero del que yo te estoy hablando a mi me gustaría que te siga acompañando y alumbrando en todos los aspectos de la vida porque tu te lo mereces todo y con tu simpatía y belleza te lo estas ganando.
A mi me gustaría y no quiero exagerar, que si yo pudiera alcanzar esos astros tan bonitos para que alumbraran tu vida por don de quiera que vayas. Y como yo opinan muchos más. De eso no te puedes quejar, porque tú te mereces eso y mucho más.
Espero y deseo que te guste este poema que te lo tienes muy merecido y con estas palabras yo hasta pronto me despido.

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